sábado, 10 de diciembre de 2011

¿QUÉ PINTA EL REINO UNIDO EN EUROPA?


               Las reticencias del Reino Unido sobre Europa son  históricas; no han surgido de repente. Quieren estar en Europa, pero son euroescépticos; y a mucha honra. Y el resto de países europeos haciéndoles “la ola”. ¡Ya está bien!. Si se quieren ir de la Unión Europea, que se vayan en buena hora. Que de una puñetera vez den la cara abiertamente y saquen la bandera de las barras y  estrellas que llevan escondida en la chistera.

            En 1.957 firman el Tratado de Roma (CEE), antecedente de la UE, seis países: Francia, Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, Italia y Alemania. Gran Bretaña no quiere; se niega. Por el contrario, propicia la creación de la EFTA, una zona de libre cambio, a la que se adhirieron Suecia, Suiza, Noruega, Dinamarca, Austria y Portugal.

Hasta 1.973 (dieciséis años más tarde) el Reino Unido no se adhiere a la CEE. Como es habitual en la historia de la Gran Bretaña, esta adhesión solo busca el interés particular; ver qué “puede sacar” de esta nueva situación. Los británicos han visto que la CEE era más práctica que la EFTA. Pero en sus más firmes convicciones, ellos son el Reino Unido de la Gran Bretaña y el resto, eso que llaman Europa.

Durante la década de 1.980 a 1.990 Margaret Tatcher y Ronald Reagan, se entienden perfectamente, tanto política como económicamente, al margen de los otros socios europeos de la Gran Bretaña. Es en esos momentos cuando se desarrollan las políticas neoliberales más rotundas, a ambos lados del Atlántico, avaladas y aplaudidas por la neoyorkina Wall Street y la City londinense. Es decir, por los dos focos que han llevado, y siguen llevando, la voz cantante del mundo financiero y que propiciaron la desregulación total del negocio financiero y el desarrollo galopante de la más brutal especulación que se ha conocido a nivel mundial.

El 1 de enero de 1999 once países de la UE adoptan el euro como moneda común. Como era de esperar, una vez más Gran Bretaña, anteponiendo sus intereses nacionales, se niega a entrar en el euro: quiere mantener su libra esterlina fuera de este esquema. Una vez más Gran Bretaña, una de las economías más potentes de Europa, va por libre.

Ayer, otra vez, Gran Bretaña se ha desmarcado de Europa  (http://bit.ly/vUtbgL), quedándose sola frente al resto de socios europeos. “La ruptura se produce por el rechazo británico a someter su sistema financiero a Bruselas”. Quizás todos los socios europeos de Gran Bretaña estén equivocados. Pero a mí esto de querer impedir que Bruselas meta mano en el sistema financiero británico, que junto al de USA, permiten que se mantenga un mercado de divisas (http://bit.ly/9NmaPc) entre Wall Street y la City,  de más de 3 billones de $  al día, en forma de especulación pura y dura, me da suficientes pistas para saber por dónde va la cosa.  

Y yo me sigo preguntando, ¿por qué Gran Bretaña tiene que seguir en la Unión Europea?. Que se vaya de una puñetera vez y que deje de incordiar.

lunes, 31 de octubre de 2011

UN ERROR CONTABLE



                 El pasado 29 de octubre publicaba El País la siguiente noticia: “Un error contable en un banco nacionalizado reduce 2,6 puntos la deuda alemana” y la subtitulaba diciendo que “El Gobierno de Merkel descubre 55.000 millones que estaban mal contabilizados”. (http://bit.ly/tZfl52)

            Comenta la noticia que en 2009 se creó un “banco malo” para transferir los activos tóxicos del nacionalizado Hypo Real Estate y dice también que “Alemania ha recuperado 55.500 millones de deuda pública”, reduciendo 2,6 puntos el endeudamiento del país.

            A mí no me cuadran (término muy contable) en esta noticia varias cosas:

·         ¿La deuda pública alemana,  cuya contabilización errónea se descubre ahora, es un activo tóxico, que como tal se transfiere al “banco malo” creado al efecto? ¿Tan mala es la deuda pública alemana?

·         Ni el banco bueno ni el banco malo crean o destruyen deuda pública alemana. La deuda pública alemana la crea el Estado alemán y lógicamente el Estado alemán sabrá, o deberá saber, la deuda que tiene pendiente de pago, independientemente de que esa deuda la haya colocado al inversor A, al inversor B o al especulador H.

·         No  veo por ningún lado, quizás esté totalmente equivocado, que de repente, el Estado alemán rebaje su deuda pública en 55.500 millones de euros, debido a un error contable. O había creado esa deuda por 55.500 millones o no la había creado previamente. Si estaba creada y no pagada, la deuda subsiste. No me trago que un error contable en la contabilidad de un banco (aunque sea malo), haga desaparecer esa deuda.

Pongamos un ejemplo similar más cercano a nuestra vida ordinaria.

Una empresa, para financiar sus deudas, emite Obligaciones a 5 años por importe de 10 millones de euros. Esta empresa en su contabilidad, tendrá contabilizada esa emisión de deuda.  

Esta deuda es suscrita íntegramente por el Banco A. Pero el responsable de la Contabilidad de ese banco, se equivoca y contabiliza la operación, en su banco, por 20 millones de euros. La empresa emisora de esa deuda tiene formalizada y documentada su deuda por 10 millones de euros. Y el Banco A, tiene suscritos títulos de esa deuda por 10 millones de euros, aunque alguien se haya equivocado y contabilizado 20 millones.

Dentro de unos meses (o años), el Jefe de Contabilidad del banco se da cuenta de la metedura de pata y corrige contablemente el error del banco. La deuda ni ha crecido ni ha desaparecido, sigue siendo de 10 millones de euros. Y la empresa emisora de la deuda, tendrá que apechugar con ella hasta que la pague a su vencimiento. A mí me parece de cajón. ¿O es que las emisiones de deuda alemana tienen algún componente balsámico que las hace desaparecer cuando hay apuntes contables “raritos”?

jueves, 13 de octubre de 2011

METER LA MANO EN LA CAJA

           A los pocos meses de comenzar mi vida laboral, allá por el año 1964, me impresionó el hecho de que a un cajero le despidieran fulminantemente por haberse apropiado de 2.000 pesetas. El pobre hombre estaba pasando una apurada situación económica, por razones que no recuerdo, y metió la mano en la caja para tratar de resolver su problema. Aquella caja no era suya, sino de aquella Caja de Ahorros, en la que trabajábamos los dos. 
             También recuerdo de esa época otro caso. No era físicamente meter la mano en la caja, pero tenía su aquél. Resulta que al Jefe del que dependía el mantenimiento de los inmuebles de aquella Caja de Ahorros, le tocaba la lotería con una frecuencia inusual. Era un tipo con demasiada suerte. Hasta que alguien descubrió que jugaba a la lotería con el proveedor del carbón que se utilizaba en la calefacción de todos aquellos edificios. Esta curiosa coincidencia provocó también el despido de aquella persona. Al nuevo responsable del mantenimiento de inmuebles no le tocó la lotería en su vida. Se limitó a desarrollar su función normalmente, sin compañeros de juego.
            Son dos casos parecidos. Uno muy simple, aislado y de poca relevancia económica y el otro más sofisticado, continuado  y de efectos económicos más importantes para aquella Caja de Ahorros. El cajero tuvo que devolver las 2.000 pesetas, pero no recuerdo que el afortunado jugador de lotería devolviera ni una sola de todos los premios percibidos.
            Hoy aquel cajero y aquel jefe, serían dos pringados. Hoy se juega a lo grande. Los máximos responsables de la debacle de las Cajas de Ahorros, han metido mano no en la caja, sino en la Caja, de mala manera. Porque llevarse unas indemnizaciones, bonus, o como coño queramos llamarlo, supermillonarias (de euros, no de pesetas), por tener que irse, o porque les obliguen a irse, después de haber dejado estas entidades hechas unos zorros, es inmoral e ilegal. Y mantengo lo de ilegal, mal que les pese a esos responsables. Y mantengo que es ilegal, porque las indemnizaciones, bonus o lo que sea, aprobadas por ellos en su único provecho, y con el consentimiento e inhibición de supervisores (Comunidades Autónomas y Banco de España) y de Sindicatos (presentes en todos los Consejos de Administración de las Cajas), son un caso flagrante de prevaricación. Esto es: aprobar resoluciones a su favor, a sabiendas de que son injustas. ¿O es muy justo implantar un tipo de negocio que lleve a una entidad a ser rescatada con dinero de los contribuyentes, y que los responsables de esa debacle, hayan “legislado” que ellos tengan “derecho” a percibir unas indemnizaciones supermillonarias por irse, aunque ellos hayan provocado las pérdidas millonarias?. ¿Es que no hay en este país ningún colectivo de contribuyentes perjudicados, o de jueces decentes que se den cuenta de algo tan evidente?. ¿O es que en este asunto hay tanta mierda, la que se ve y la que no se ve, que afecta a tanta gente, que mejor es taparlo todo y que pague el de siempre: el contribuyente?. ¿Y los Sindicatos, parte integrante de los Consejos de Administración, qué opinan, qué decisiones han tomado?.
           A mi juicio, está claro que las Comunidades Autónomas y el Banco de España no van a hacer nada (¡ojala me equivoque!). Unas, han utilizado a las Cajas de Ahorro en su propio beneficio y el de sus amiguetes, y el otro ha sido voluntariamente miope. Ahora todos se lavan las manos y aquí no pasa nada, ni nadie dimite. Al contrario, están más crecidos.
           Es de vergüenza que solo algún acelerado, conocedor cercano de un modelo de negocio que ha criticado desde dentro, se atreva de nuevo a seguir criticando, ahora desde fuera, el modus operandi de tanto inútil, tanto lameculos y tanto sinvergüenza, como se ha movido y se sigue moviendo por el ancho mundo de las Cajas de Ahorro.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

TRECE Y MARTES


            Ayer fue trece y martes . Dicen los que creen en esas cosas que es día de mala suerte. Ayer, una persona que había depositado su boleto del “Euromillón” en la región de Normandía (Francia), ha resultado ser el único acertante del sorteo  (http://bit.ly/qQKL0x), y se va a embolsar 162.256.622 euros. Una cantidad que, al menos a mí, me produce vértigo; me marea.

            ¿Ha sido para esta persona este martes y trece día de mala suerte?. Pienso que la mayoría de la gente dirá que ha tenido una suerte inmensa. Estamos acostumbrados a medir la suerte de las personas en función de los pelotazos que dan, sean con la Euromillonaria, con cualquier otra Lotería, o con un negocio fácil y rápido que les proporciona en un plis plas  una enorme cantidad de dinero. Cuantificamos la suerte y reducimos el concepto suerte a una cifra dineraria más o menos elevada. Pero ¿la suerte es eso?.

            He conocido durante mis largos años de vida profesional unos cuantos golpes de esa suerte, con lotería, quinielas, primitiva, etc.. Y he visto cómo la vida de alguna de esas personas empeoró. La nueva preocupación por qué hacer con tanto dinero les trastornó su vida; en algunos casos de los que conocí, gravemente.

En mi opinión, los agraciados en este tipo de sorteos, sobre todo los que obtienen los premios más altos, se enfrentan también a una dificultad añadida: “digerir” la cuantía del premio. Hay que tener las ideas muy claras y la escala de valores bien asentada, para hacer felizmente esa difícil digestión.

Le deseo a la persona agraciada con esa mareante cantidad de dinero una feliz digestión. Mucha suerte.

lunes, 1 de agosto de 2011

CATEDRÁTICO, ACADÉMICO E IGNORANTE.

           El pasado viernes viernes 29 de julio, publicaba el diario ABC en su página 3  (“La Tercera”) un artículo firmado por Serafín Fanjul, catedrático de Estudios Árabes y miembro electo de la Real Academia de Historia. El artículo se titula “Carmen y la Spanish Revolution”.

           No tengo elementos de juicio para cuestionar los conocimientos de este señor, tanto en lo que se refiere a Estudios Árabes, como a sus conocimientos de Historia. Pero, de la lectura del referido artículo, puedo colegir que además de ser catedrático y académico,  es un profundo ignorante. Dice el dicho popular: “no hay peor ignorante que el que no quiere saber”.  
            El Sr. Fanjul, no quiere saber del presente que tiene ante sus ojos. Se pierde en sesudas disquisiciones académicas e históricas sobre el estereotipo de la España de Merimée y su “Carmen”, pero es incapaz de ver la evidencia de los cambios que se están produciendo en nuestra sociedad (que también es la suya, mal que le pese) a una velocidad que, por lo visto, también le supera.
            Alude el articulista repetidamente a los “indignados” de la Puerta del Sol y se deduce fácilmente de sus afirmaciones que no son santo de su devoción. Es curioso que en un artículo en el que se explaya sobre los estereotipos de la vieja España, emplee él mismo un estereotipo: “chusma apasionada y anárquica” al referirse a los cientos de miles de ciudadanos que han mostrado su rechazo al sistema político y socioeconómico que nos domina y que ha provocado la crisis que estamos soportando.
No dudo que el Sr. Fanjul sea un gran conocedor del episodio de la “Carga de los Mamelucos del 2 de mayo de 1808”, pero cuestionar la inteligencia de la mayoría de esos  “obsequiados por la prensa con la denominación indignados”, es pasarse un pelín (por decirlo finamente).
Decir que “Las chabolas y la fauna de la Puerta del Sol (toleradas cuando no auspiciadas por el ministro del Interior y por el alcalde de Madrid)”, es una falacia (“engaño, fraude o mentira con que se intenta dañar a alguien (RAE)”. Desde luego eso de ser académico no está reñido con ser mentiroso.
Más adelante afirma que “durante unos días la prensa internacional -cuyos corresponsales parecen no enterarse de nada, obstinados en encontrar la verdadera España como los viajeros del XIX – confundiera al don José de Carmen con la sombra del Cojo Manteca y los chamizos plantados contra Esperanza Aguirre (la única a la que han distinguido con insultos personales) con la maravilla neoclásica de la Real Fábrica de Tabacos de Sevilla. La Spanish Revolution dio la vuelta al mundo: de nuevo emergía la chusma apasionada y anárquica que tanto gustaba ensalzar (en España) a Merimée; al rebufo de Túnez y Egipto periodistas anglosajones se creían los cartelitos con las dos palabras y media de inglés que conocían los acampados, tan alienados y rendidos ante el idioma imperial - ¡qué originalidad! – como vulgares ejecutivos de AZCA a quienes  dicen detestar ”.  Voy a evitar comentar las chorradas contenidas en el entrecomillado, por aquello de guardar la compostura y el respeto a las personas, que el Sr. Fanjul es incapaz de guardar.
De esta guisa, ofendiendo repetidamente a los “indignados”, de los que dice entre otras cosas, que “se peinan poco” (él tampoco tiene mucho pelo que peinarse),  transcurre el referido artículo.
No soy más que un simple ciudadano, preocupado por lo que sucede a mi alrededor, en la sociedad en la que vivo y en el momento actual, al que le gusta enterarse de las cosas antes de opinar sobre ellas. Me gusta estar al día y trato de conocer lo que otros, con mayores conocimientos y experiencia que yo, opinan sobre los cambios sociales que se están produciendo. De esta manera he conocido la opinión de Stéphane Hessel en sus libros “Indignez-vous!” y “Engagez-vous!” (“¡Indignaos!” y  “¡Comprometeos!”),  o la de los once autores que Rosa María Artal ha coordinado para publicar “Reacciona” (J. Luis Sampedro, Federico Mayor Zaragoza, Baltasar Garzón, Juan Torres López, etc.). Y la de Joseph Stiglitz, premio Nobel de Economía, en sus libros “El malestar en la globalización” y “Caída Libre”. Quizás el Sr. Fanjul todavía no  haya leído estos textos.
También he acudido a alguna reunión de “indignados”, en la que pude observar además de jóvenes, gente de todas las edades, e incluso jubilados como yo. No sé si el Sr. Fanjul habrá acudido a alguna de estas reuniones (de acceso libre), pero la “fauna”, como él nos denomina a los que acudimos a estos actos , se expresaba con una corrección y respeto hacia el resto de asistentes, que dista mucho del estereotipo que  quiere reflejar el articulista. Es curioso que hasta Joseph Stiglitz, , haya tenido la “ocurrencia” de dirigirse a esos “indignados”, en una de las múltiples reuniones que siguen celebrándose, animando a los que creemos en el cambio social que se está llevando a cabo, a continuar en nuestro empeño.
Tiene mucho mérito llegar a ser catedrático y académico; requiere mucho esfuerzo y preparación y el Sr. Fanjul lo ha conseguido. Dejar de ser ignorante es mucho más sencillo. En la mayoría de las ocasiones basta con abrir un poco los ojos y darse cuenta de lo que pasa a nuestro alrededor todos los días.

martes, 5 de julio de 2011

¡A BUENAS HORAS MANGAS VERDES!


            En El País de ayer, 4 de julio de 2011, publica un extenso artículo titulado “Cajas de ahorros e interés público” (http://bit.ly/ivAGWf) Rodolfo Martín Villa. En el  extenso y variado curriculum del articulista, podemos apreciar que fue, en su momento (año 1989), presidente de la Comisión de Control de Caja de Madrid. En momentos anteriores y posteriores ostentó los más diversos y variados cargos: desde jefe nacional del SEU,  ministro de Gobernación (hoy  Interior) o presidente de Endesa.

            Recoge el Sr. Martín Villa en su artículo la eterna cuestión de la “indeterminación de la propiedad de las cajas”. Hace referencia a la representación en los órganos de gobierno de las cajas, de los clientes, de las entidades promotoras e incluso de la anomalía de la representación política, que justifica con el argumento de que “nadie mejor que los representantes políticos para discutir la cuantía, y sobre todo el destino, de los fondos dedicados a la obra social”. Dice también que “puedo asegurar que ni Joaquín Leguina, ni Ruiz Gallardón ni Esperanza Aguirre, ni sus distintos gobiernos, han interferido en las decisiones de Caja de Madrid” (¡a otro perro con ese hueso D. Rodolfo!).

            Comenta el articulista su opinión sobre los gestores de las cajas y de esta forma dice que: “el resultado de la gestión de las cajas ha dependido de la calidad de sus gestores”  pone el ejemplo de que “Caja Madrid, bajo la presidencia de Jaime Terceiro, (1988-1996), se convirtió en una de las entidades líderes en eficiencia, rentabilidad y solvencia del conjunto de bancos y cajas”. Casualmente en ese periodo él ejerció de presidente de la Comisión de Control. Sin embargo, omite la desastrosa gestión de Miguel Blesa en Caja Madrid durante 14 largos años, aunque él no estuviera en la pomada en ese periodo.

            Habla el Sr. Martín Villa de la responsabilidad del Banco de España en la crisis de las cajas y da su opinión sobre la inoportunidad de que “en la actual situación económica ni es conveniente ni prudente que las cajas acudan a los mercados con objeto de ampliar capital o vender participaciones. Los únicos que se beneficiarían con  semejante operación, serían los compradores. Esta venta podría constituir una auténtica irresponsabilidad, por cuanto provocaría un muy importante deterioro de nuestro sistema crediticio. Supondría tanto como un expolio al conjunto de los ciudadanos y especialmente a los más necesitados: los beneficiarios de la obra social”.

            Coincido plenamente con la opinión del Sr. Martín Villa sobre el hecho de que la privatización que se está llevando a cabo de las cajas de ahorro, va a beneficiar exclusivamente a los compradores y se preocupa poco o nada por los clientes. Conozco un poco de qué va la cosa, entre otras circunstancias, por haber vivido desde dentro, los profundos cambios sucedidos en Caja de Madrid desde el año 1964 hasta el año 2000. Y seguir desde fuera, aunque de manera muy cercana, los producidos desde entonces hasta hoy.

Lo que no me convence en absoluto es que emita su opinión cuando “todo el pescado está ya vendido”. ¿O es que alguien que ha estado ligado muy fuertemente a Caja de Madrid, que ha vivido por y para la política y que se supone debe conocer los entresijos del mundo financiero español no podía haber hablado antes?. ¿Por qué cuando él era consejero y presidente de la Comisión de Control de Caja Madrid (en época de vacas gordas) no propuso, tanto a las autoridades financieras como a los poderes políticos, a los que tenía fácil acceso, que se definiera de una vez la propiedad de las Cajas?. No, entonces no le debía venir bien; hoy quizás ya no tenga nada que perder. Cualquiera de nosotros es capaz de acertar una quiniela de quince resultados los lunes por la noche.  ¡A buenas horas mangas verdes!.

domingo, 5 de junio de 2011

¡¡¡SIN IVA!!!


           La multinacional alemana Media Markt, anuncia para los días 6 y 7 de junio que venderá todos sus productos sin IVA. Este tipo de anuncio lo realiza de forma, supongo que perfectamente programada, varias veces a lo largo del año.

Esto de la economía sumergida no tiene límites. Ya hasta las grandes compañías se apuntan a este carro. Y además lo publicitan con todo lujo de detalles: en grandes carteles que pasean remolcados por furgonetas (hoy he visto dos), anuncios a toda plana en la prensa nacional (véase anuncio de “El País”),  en Internet,  imagino que en TV, etc. . Todo ello en el momento más sensible del año para el contribuyente: en plena época de Declaración de Renta.

            El mensaje publicitario que transmiten los anuncios no puede ser más claro. “Nos cargamos el 18 % de IVA”; “Día sin IVA, -18 % de IVA”; “Solo lunes 6 y martes 7”.

            El ciudadano que ve estos anuncios, lee claramente lo que los anuncios le transmiten: que durante dos días Media Markt va a vender todos sus productos sin IVA. Es decir, va a contravenir la Ley.

Se va a poner a la altura de ese “chapuzas” que viene de vez en cuando a resolvernos esos problemas domésticos que todavía no hemos aprendido a resolver nosotros, y nos pregunta: “¿Sin IVA, verdad?”. O a la de ese empleador, que pomposamente se bautiza como “pequeño empresario”, e incluso como “gran empresa” (que conozco de todo), que mantienen permanentemente en sus nóminas empleados a los que pagan con el mismo dinero negro que cobran por algunos de sus trabajos. Y entretanto la economía sumergida ya va por el 24 % del PIB.

Como suele ser habitual en muchos de los anuncios que nos invaden, siempre aparece un asterisco situado de forma estratégica. Luego viene la ardua tarea de buscar la referencia de ese asterisco. Esta tarea tan solo la realizamos unos pocos. Esos “bichos raros” que leemos la letra pequeña. Pues bien, también en este caso hay asterisco. El bicho raro que lo busca, lo encontrará semioculto en un pequeño margen dentro del gran anuncio,  con una letra superpequeña que dice: “Descuento equivalente al importe del IVA aplicable a cada producto. Todos los productos incluyen IVA”.

¿De esta manera innoble, semioculta y claramente engañosa, salva el culo este anunciante?. Después de transmitir el mensaje “Sin IVA”, claramente ilegal, ¿se vale de subterfugios y letras pequeñas para cubrir el expediente?. A mí me parece que esto es engañar al consumidor.

Si esta empresa o cualquiera otra quieren rebajar sus productos un 18 %, que lo hagan y lo publiquen así. Pero no engañen al consumidor diciéndoles que durante dos días “se cargan el 18 % de IVA en todos sus productos”.

Por cierto, ¿qué hacen al respecto las distintas Administraciones?. ¿Están buscando a quién le compete defender los derechos de los consumidores?: Estado, Comunidad Autónoma, Ayuntamiento … … . ¿La Agencia Tributaría no tendría algo que decir cuando se “manosea” un impuesto como el IVA, con fines eminentemente equívocos y utilizando el mensaje que lanzan como reclamo publicitario?

miércoles, 1 de junio de 2011

LA CASILLA 105


               Ya estamos en plena campaña de Declaración de Renta. Y como todos los años,  figura en los impresos la casilla 105. Si el contribuyente señala esta casilla con un aspa (o una cruz, sería más propio), “el 0,7 % de la cuota íntegra, se destina al sostenimiento de la Iglesia Católica”.

            Del mismo modo que los grandes almacenes, los principales hipermercados o los grandes bancos, nos bombardean permanentemente con sus ofertas publicitarias, la Conferencia Episcopal Española, hace lo propio en estas fechas para que el contribuyente español marque con una X la casilla 105 de su Declaración de Renta.

El pasado 30 de mayo, el periódico “El País” contenía un suplemento publicitario de 16 páginas, titulado “X tantos”, y elaborado por la Conferencia Episcopal. El objetivo de esta publicidad es conseguir el mayor número de contribuyentes que coloquen la X en la casilla 105. Desconozco el coste de esta publicidad, pero la esquela que insertaron Dª Rita Barberá y D.  Francisco Camps, (1/2 página de “El País” cada una), con motivo del fallecimiento del arzobispo de Valencia Sr. García Gasco, costaba 9.440 € más IVA, cada una. Quizás tratándose de 16 páginas y ser publicidad “al por mayor” hayan tenido un precio más reducido. No conseguí que en “El País” me dieran esa información, pero así, a ojo de buen cubero, me imagino que la cosa no habrá bajado de 100.000 euros.

Una vez más, la Iglesia oficial española se comporta como una sociedad mercantil: invierte en publicidad para recoger mayores ingresos. Y como tal sociedad mercantil, esgrime su argumentario para que el cliente (en este caso el contribuyente), “compre el producto”: ponga la X en la casilla 105.

Entre esos argumentos, a mí me choca el que dice que, “Este sistema, esta fórmula, no va contra nadie, ni contra nada. No va contra los bolsillos de los contribuyentes que signen la X en el casillero correspondiente a la Iglesia católica. Sencillamente, facilita su financiación y destina el citado porcentaje a un fin concreto”.

En mi opinión, nos están dando de comulgar con ruedas de molino, con argumentos como estos. El dinero del impuesto de IRPF que tengo que abonar, como consecuencia de las rentas que obtengo cada año, deja de ser mío y es del Estado en el mismo momento en que lo devengo y pago. El sistema de la X en la casilla 105, permite al contribuyente manipular, en favor de un único beneficiario, el destino de parte de los impuestos de todos. O se instituye un interminable abanico de destinos (y de casillas), para que cada contribuyente indique dónde le gustaría aplicar una parte de la cuota íntegra de su Declaración, o se suprime la casilla 105.

Con una propuesta como la que indico, probablemente se organizaría un galimatías importante de “fines concretos”; y dudo mucho de su operatividad. Evidentemente, el fin concreto de la casilla 105 está muy claro y, según la argumentación del folleto publicitario “no va contra nadie, ni contra nada”. Solo va en beneficio de un destinatario.

domingo, 15 de mayo de 2011

JUNTAS GENERALES DE ACCIONISTAS

          En estos días, es bastante habitual encontrar en la prensa diaria múltiples anuncios de Juntas Generales de Accionistas de Sociedades Anónimas. Es el momento que eligen la mayoría de ellas para celebrarlas. El año pasado, por estas fechas, escribí un post: “Coincidencias”, en el que contaba algo muy similar a lo que voy a referir hoy.
            Cada viernes, cuando acudo a la Universidad Carlos III de Getafe (Madrid), me regalan dos periódicos de los de pagar: el ABC y El Economista. Pues bien, el pasado viernes día 13 de mayo, me llamó la atención ver que las páginas 18, 19 y 20 de “El Economista”, solo contienen 34 anuncios de Juntas Generales de Accionistas. De éstos 29 corresponden a SICAV’s. (Sociedades de Inversión de Capital Variable). Pero, ¿qué es lo que me llamó la atención?. Pues unas cuantas cosas que paso a contar.
1.      Así como en los anuncios de las otras sociedades anónimas, el firmante de la convocatoria se identifica personalmente con nombre y apellidos, en todos los anuncios de las SICAV’s no se identifica personalmente nadie. Las juntas las convoca “el Presidente”, “el Secretario” o “el Vicesecretario”, que ocultan sistemáticamente su nombre. ¿Serán sociedades secretas?.
2.      Me resulta muy curioso y extraño que, 19 de las 29 SICAV’s que se anuncian,  vayan a celebrar su Junta General todas a la vez el día 20 de junio de 2.011 en la Plaza de Colón nº 1 de Madrid, donde casualmente está ubicada la sede social de Barclays Bank en España. La primera Junta está anunciada para las 8 h. y la última para las 17,30 h. Cada Junta de las convocadas para ese día, se celebrará cada media hora. El Orden del Día de todas ellas es el mismo y consta de 7 puntos, entre ellos, “Lectura y aprobación del Acta de la Junta”. Luego criticaremos la eficiencia y la productividad españolas. Creo que merecería que se colgaran en You Tube los videos de estas Juntas. Debe de ser alucinante ver despachar en un pis pas, algo aparentemente tan serio como una Junta General de Accionistas.
3.      Las 10 Juntas del resto de SICAV’s que se anuncian, se celebrarán el próximo 22 de junio de 2.011 en la calle Padilla nº 17 de Madrid, donde casualmente también, se ubican algunas sociedades especializadas en “gestión financiera”. Una de ellas (que quizás no tenga nada que ver con estos anuncios), proclama en su web que está asociada a SYZ & CO., con más de 20.000 millones de francos suizos gestionados en activos financieros. En este caso, todas las Juntas convocadas se celebrarán a las 12 horas. Todas tienen el mismo Orden del Día, con diez puntos a tratar, entre ellos la “Lectura y aprobación del Acta”. Si lo anterior alucinaba, esto ya es, por lo menos, de record Guiness. Diez Juntas de Accionistas a la vez y en el mismo sitio, merecería un reportaje de “Informe semanal”. Así se podría demostrar al mundo entero un modelo de eficacia que probablemente tendrán patentado.
Me podría haber ahorrado escribir estas historias que vuelvo a repetir, pero no lo puedo evitar. El mundillo que se esconde detrás de todo este entramado societario, me sigue pareciendo que no cesa de alimentar la crisis que nos agobia. De entrada, con unas injustas ventajas fiscales que suplementamos los demás. Y además, colaborando muy activamente al funcionamiento del “casino financiero mundial” en el que ganan siempre los mismos, a costa del resto de sufridores y paganos.
Repito otra vez (y no me importa ser pesado) lo que decía hace unos días: “Estamos ante el terrorismo de guante blanco y cuello duro, el que se desarrolla en las sedes de esas grandes multinacionales financieras, con el total consentimiento de los Estados, y amparado en esa burda mentira de la libertad de los mercados, que manipulan constantemente según su conveniencia. Estos terroristas están perfectamente identificados y desarrollan impunemente su mortífera actividad sin que nadie les moleste. Y este sí que es el terrorismo que más víctimas genera, que más muertos produce (de hambre entre otras cosas) y que viene deteriorando a esta sociedad a pasos agigantados”.

domingo, 8 de mayo de 2011

LOS OTROS TERRORISTAS


     Hace una semana  los USA han acabado con la vida de Osama bin Laden, el terrorista más buscado en los últimos diez años, al que le achacan unos cuantos miles de muertos como consecuencia de los atentados llevados a cabo por la organización Al Qaeda, de la que era el máximo responsable. Los USA se empeñaron hace diez años en acabar con este sujeto que tanto daño había hecho al prestigio de ese país y acaban de culminar con “éxito” su objetivo. Las muestras de júbilo en el pueblo americano han sido multitudinarias y reflejan el sentimiento de ese pueblo por lo que consideran “hacer justicia”. A mí no me lo parece de esta manera, pero eso es otra historia.

     Cada día van surgiendo noticias de que la ciencia médica ha descubierto éste o aquél remedio para combatir eficazmente esas enfermedades que matan todos los años a un elevado número de personas en todo el mundo. Los culpables de esas muertes son agentes patógenos de lo más diversos.  La ciencia médica lucha contra el terror de las enfermedades y consigue cada vez más éxitos en este empeño.

     Desde hace cinco años estamos asistiendo a una gravísima crisis económica, provocada sin lugar a dudas, por otro tipo de terrorismo al que los Estados no quieren combatir. Tampoco nosotros, ciudadanos de esos Estados, hacemos mucho para combatirlo.

     Me estoy refiriendo al terrorismo de guante blanco y cuello duro, al que se desarrolla en las sedes de esas grandes multinacionales, con el total consentimiento de los Estados, y amparado en esa burda mentira de la libertad de los mercados, que manipulan constantemente según su conveniencia. Estos terroristas están perfectamente identificados y desarrollan impunemente su mortífera actividad sin que nadie les moleste. Y este sí que es el terrorismo que más víctimas genera, que más muertos produce (de hambre entre otras cosas) y que viene deteriorando a esta sociedad a pasos agigantados. Cada vez los ricos son más ricos y los pobres más pobres. Las consecuencias de esta gran crisis financiera no las pagan los que la han provocado, sino que, para mayor descaro, las pagan todos los ciudadanos con sus impuestos. Ellos, los ricos, protagonistas de este terrorismo, salvaguardan sus fortunas, que curiosamente crecen con la crisis, tanto en paraísos fiscales como en sus propios países. Los políticos que conforman los Gobiernos son incapaces de luchar contra ellos; bien porque no puedan o porque no quieran o no les interese personalmente, que de todo hay. Además cuentan con unos inestimables colaboradores: los periodistas de las páginas salmón, que se empeñan en llamarlos “inversores”. Incluso “sagaces inversores” o “magos de las finanzas”.

     Yo no me trago esos calificativos. Hace un mes y medio los llamaba “trileros financieros”, hoy me atrevo a llamarlos terroristas financieros. Y desde este humilde rincón, exijo a todos los políticos que ostenten cualquier responsabilidad, que luchen en nombre de la humanidad contra estos terroristas. Hay medios sencillos y de fácil aplicación. Solo es preciso tener voluntad y un par de narices para ponerlos en práctica. Como he dicho en ocasiones anteriores no soy un especialista en el tema, pero el sentido común me dicta algunas normas elementales que podrían aplicarse fácilmente. Por ejemplo:

a)     Liquidación inmediata de los “paraísos fiscales”.

b)    Prohibición, a nivel mundial, de lo que a mí se me ha ocurrido denominar, sin ningún rigor científico, “guarrerías financieras”. La lista de estas guarrerías es larga: por ejemplo los “CFD’s”, el “Mercado Forex”, o una interminable lista de productos de apuestas financieras encuadradas todas ellas en el mundo de los “Derivados Financieros” . Esto es el gran Casino mundial financiero en el que ganan los de siempre todas las veces y perdemos el resto de contribuyentes cuando vienen mal dadas.

c)     Control, también a nivel mundial, de las operaciones bancarias. Exigencia a los bancos de unos estándares mínimos de solvencia y vigilancia permanente de su cumplimiento.

     Parece muy utópico eso de “a nivel mundial”, pero creo que no lo es si los políticos de todos los países  fueran medianamente decentes. Lo utópico es esto último.

     Si personas como Stèphane Hessel , Jose Luis Sampedro, Federico Mayor Zaragoza, Juan Torres López o Angels Martínez Castells, entre muchos otros, están dispuestos a luchar contra este tipo de terrorismo, ¿por qué no voy a poder hacerlo yo desde este rinconcito?. Desde luego mi aportación será pequeña, pero mi ilusión por luchar contra estos terroristas será igual de fuerte.   


sábado, 26 de marzo de 2011

LA PALANQUITA.





                 Recuerdo que en el primer coche que me compré, un Seiscientos, tenía una palanquita junto al volante, que se movía hacia arriba y hacia abajo. El vendedor me explicó que era el mando de los intermitentes: unas lucecitas que tenía aquel Seiscientos delante y detrás. Moviendo la palanquita hacia abajo, se encendían intermitentemente (de ahí el nombre) esas lucecitas de la izquierda, tanto las delanteras como las traseras. Estas lucecitas indicaban al resto de conductores que iba a girar a la izquierda. Si movía la palanquita hacia arriba, pasaba exactamente lo mismo con las lucecitas de la derecha y el resto de conductores podía conocer mi intención de girar a la derecha. Además, moviendo la palanquita hacia o hacia abajo, podía advertir al resto de conductores que iba a cambiar de carril, cuando circulaba por una de esas escasas carreteras que tenían dos carriles.

            Han pasado más de cuarenta años y los Seiscientos ya no se fabrican. Hoy tenemos unos coches con muchos más avances técnicos. Con unos tableros de instrumentos muy completos: con sensores de lluvia, sensores de luz, ordenador de a bordo, navegador, unos equipos de música de impresión, y qué sé yo cuántas más virguerías. Incluso siguen teniendo una palanquita al lado de volante para accionar las lucecitas de los intermitentes. ¿Seguro?. Al menos mi coche, que tiene muchas chorraditas, también lleva la palanca de los intermitentes. Y funciona con el mismo sistema que la de mi primer Seiscientos. Y es muy fácil de utilizar.

            Lo chocante es que tengo la sensación que hay muchos coches, incluso de la misma marca y modelo que el mío, y sobre todo los de muy “alta gama”, que no deben tener la tal palanquita. ¿Será cosa de los avances técnicos?. Cada día veo menos coches a los que se les enciendan los intermitentes y que, de repente, giran a izquierda o derecha provocando unos frenazos importantes por parte del resto de conductores y algún que otro golpe. Los fabricantes deberían replantearse este tema. Sencillamente, no deben de funcionar esas palanquitas.

Pensando un poco más sobre este asunto, que me tiene preocupado, estoy empezando a atar cabos. ¿A ver si todos los coches, sean de la marca que sean, tienen la palanquita y el problema de los intermitentes no es técnico y es de otro tipo?. ¿Pudiera ser que lo único que les importa a determinado tipo de personas es lo que hagan ellos y el resto les importa un pito?. ¿Va a tener que ver la historia de la palanquita, para prevenir a los demás y evitar accidentes, con un tipo de comportamiento habitual de bastantes personas?. Pues va ser que sí. Además, acabo de caer en la cuenta de la cantidad de palanquitas que no usan algunos.

            Si soy de esos que ignoran la palanquita de que hay más gente, ¿con qué cara puedo exigir a mis representantes que no me ignoren a mí?. Si soy de esos que ignoran la palanquita del IVA, en esa factura que no me va a dar el manitas de turno por la última chapuza que me ha hecho en casa, ¿con qué cara puedo exigir que metan mano a esos golfos de la economía sumergida?. Y si soy de aquellos de misa, comunión y pésame Señor, e ignoro la sagrada palanquita de mi religión,  que me dice que tengo que pagar adecuadamente a mis empleados y tratarles como personas, ¿con qué cara puedo ni siquiera mirarles a los ojos y dormir tranquilo?.

Pues vaya lío el de las palanquitas. Ahora resulta que vamos a tener que preocuparnos de los demás. Incluso de la economía sumergida. Eso son pamplinas de meapilas. Yo, que soy un tío hecho y derecho, me basto y me sobro solo;  los demás no son cosa mía. Para eso de los demás está el Gobierno, que por cierto siempre lo hace muy mal, y para los pobres, Cáritas y esas moderneces que han inventado ahora y que llaman ONG’s .

viernes, 18 de marzo de 2011

TRILEROS FINANCIEROS

       Durante las últimas décadas y singularmente en la última, el “vale todo” que ha imperado en los mercados financieros, ha propiciado la profunda crisis económica que estamos padeciendo. No voy a realizar ningún nuevo análisis sobre la crisis, ni por desgracia, tengo la solución del problema. Me preocupa mucho el desenlace que tenga y deseo fervientemente que acabe cuanto antes. Ojalá que en el menor tiempo posible puedan recuperar su trabajo tantas personas que hoy no lo tienen.
      Una de las cosas más sensatas que podemos hacer cuando nos encontramos con un problema, además de buscar su solución, es poner los medios para procurar que en el futuro ese problema no se reproduzca. Pues bien, a mi me parece que en el momento actual y ante el problemón que tenemos, ni se ponen soluciones, ni hay una voluntad decidida de prevenir su repetición en un futuro.
      En mi opinión, para resolver un problema lo primero que hay que hacer es identificarlo correctamente. Creo que esta tarea ya la han llevado a cabo  especialistas muchísimo más cualificados que yo. Pero a mí se me antoja que, además, es necesario identificar plenamente a las personas que han ocasionado esta crisis y exigirles que paguen por sus “dudosas prácticas financieras”. Las cosas no pasan porque sí. Los hechos suceden porque hay unas determinadas personas que deciden hacer algo y porque otras permiten hacer ese algo. Y me parece que cuando suceden hechos tan graves como que Grecia quiebre, que Portugal esté al borde, que España ofrezca todas las dudas del mundo, que Irlanda tampoco genere mucha confianza, que las Bolsas, europeas y americana, parezcan una montaña rusa, es preciso conocer quienes son los provocadores de tanta mierda.
      Estos provocadores, verdaderos trileros son pocos y dan poco la cara. Tienen a su servicio todo un ejército de curritos como Jerôme Kerviel (que al final son los que pagan los platos rotos), que no paran de mover vertiginosamente los miles de millones de euros, en la mesa de juego que montan cada día en las Bolsas más importantes del mundo. Nosotros, honrados ciudadanos, perdemos sistemáticamente las apuestas que se cruzan entre ellos. Pero ellos, siempre ganan. Si la economía real está en auge ganan, y si hay crisis ganan también; incluso más que antes. Todo ello sin aportar ningún valor añadido a la economía real. Todo es juego y trampas. Es normal entre ellos las jugadas de ventaja previamente amañadas.
      De esta forma pueden producirse beneficios como los del Sr. Paulson (en el centro de la foto): 3.700 millones de euros (el solito) en 2.010. Para hacernos una idea y comparar, en ese mismo, año el Banco Santander gano en Europa 3.387 millones de euros, el BBVA 1.935 millones de euros en Europa y 2.671 en América. Goldman Sachs, por cierto, banco multado por el regulador bursátil USA por fraude en la comercialización de activos hipotecarios, ganó en 2.010, solo 6.145 millones de euros. Otro “pajarillo” que aparece en la lista Forbes con una fortuna de 14.200 millones de dólares a 31.12.2010, es el Sr. Soros (en la foto, primero por la izquierda), que hace no muchos años casi se carga la libra esterlina apostando contra su cotización. El segundo por la izquierda en la foto, el Sr. Simons, solo pudo reunir 8.700 millones de dólares a 31.12.2010 y se descuelga un poco en la lista Forbes. A mi estas cifras me producen un cierto mareo y una gran indignación, pues proceden simple y llanamente del juego especulativo.
      Pero lo más triste, es que nosotros colaboramos pasiva e inocentemente en ese juego especulativo, con una parte importante de nuestros ahorros. Me refiero a que muchos de esos enormes flujos monetarios que todos los días ruedan por las principales Bolsas del mundo, y que estos tramposos cambian de “cubilete” a velocidades de vértigo, son esos ahorros que nosotros hemos guardado confiadamente en Fondos de Inversión o en Fondos de Pensiones.
      Como decía al principio de este artículo, yo no tengo la solución para resolver este problema. No sé cómo se puede luchar contra los lobbys que manejan este cotarro. Nos hemos metido en un modelo de sociedad que propicia que este tipo de individuos, que ignoran deliberadamente el concepto de ética, puedan seguir estafándonos mucho tiempo. No veo otra salida que un profundo cambio social. Y esto es muy complicado, pero no imposible. Desde luego, si la mayoría de nosotros seguimos en el juego con nuestro papel de colaborador pasivo, el juego no se detendrá y seguiremos perdiendo siempre. Creo que debemos movernos, aunque nos cueste, y comenzar entre todos a desmontar este chiringuito. Debemos exigir a los políticos que dejen de venderse sistemáticamente a estos trileros de mierda que han conseguido, entre otras cosas, llevar al paro y a la ruina a tanta gente. Pero no debemos olvidar que las cosas no se resuelven solas. Si yo no pongo nada de mi parte para resolver el problema esperando que lo hagan otros, el problema, no solo no se resuelve, sino que aumenta.

martes, 8 de febrero de 2011

AHORA TOCA “SORTU”

Desde 1.997 hasta hoy (catorce años), la autodenominada izquierda abertzale ha adoptado doce marcas diferentes para encubrir la misma mentira. Posiblemente alguna vez acabarán diciendo la verdad. Pero han sido tantas las que han engañado, que es natural que casi nadie les crea. Yo soy uno de de esos descreídos.
Analizando la historia de los que auspician el nuevo partido, “Sortu”, no puedo olvidar a tantos de sus pretendidos demócratas de hoy, diciendo “gora ETA” y otras lindezas por el estilo. No se me puede olvidar que, hasta el momento en que escribo estas líneas, nadie, nadie repito, de esa nueva formación, haya dicho alto, claro y de forma definitiva, algo así como: “Muestro mi repulsa inequívoca a mi pasado como colaborador (cuanto menos pasivo) de ETA”. “Quiero pedir perdón públicamente a las familias de los asesinados y secuestrados por ETA, y arrepentirme de cuantas veces he brindado celebrando sus “hazañas” valerosas”. “Estoy dispuesto a colaborar con las autoridades, como un ciudadano más, a la lucha para la desaparición de ETA”. “Pido a ETA que abandone su actividad terrorista, abandone las armas y deje de matar y extorsionar”. … … Si los promotores de esa nueva formación se expresaran de esta forma y los estatutos que pretenden legalizar el nuevo partido también recogiesen estos principios, estaría dispuesto a escucharles y dejaría de comunicar, como comenté en mi anterior post "Comunicando"
Entretanto, voy a seguir como hasta hoy. La historia de mis amigos y conocidos asesinados (por error dijeron: ¡qué desfachatez!), secuestrados y extorsionados es inamovible. Y nadie, vuelvo a repetir, de esa mafia que es ETA o de sus fervientes defensores, ha mostrado, hasta este momento, el mínimo arrepentimiento por esos hechos.
Las ideas y los ideales de mis amigos eran tan respetables como las que puedan tener estos “nuevos demócratas”. Aun recuerdo a mi amigo Antxon, convencido nacionalista vasco y persona extorsionada por ETA, lanzar improperios contra Franco junto a su residencia de El Pardo, mientras a mí y al resto de acompañantes nos asustaba la presencia de la guardia mora. Antxon se jugaba la cárcel por defender unas ideas democráticas, pero nunca deseó la muerte de un adversario. Eso es política. Lo de ETA y el submundo que la ampara y mantiene no lo es.
El gran contrasentido de esta nueva añagaza es el nuevo nombre: “Sortu”, en euskera nacer. Como adorno me parece hasta bonito, como es bonito todo el euskera. Sin embargo, a mi juicio es un sarcasmo, esta identificación alusiva a nacer, para encuadrar a gente que ha brindado repetidas veces por la muerte de tantos ciudadanos y que ha vitoreado, festejado y homenajeado a tantos asesinos.

martes, 25 de enero de 2011

SED DE IDEAS

Este fin de semana, como todos los fines de semana, los partidos políticos han celebrado diversas reuniones, convenciones, mítines y otros entretenimientos para que sus afiliados se reencuentren y para que sus líderes se crean que son el no va más.

Cada lunes nos encontramos en la prensa diaria con una nutrida colección de paridas que, con el mayor desahogo, los líderes de los partidos lanzan alegremente con una finalidad múltiple: que los suyos se lo crean, que la prensa las recoja y que el resto de ciudadanos gocemos, al leerlas, … … de su incapacidad.

Pero este lunes, creo que se han superado. Había convención nacional del PP y D. Mariano Rajoy, su líder carismático, ha cerrado los actos de este partido con una proclama grandilocuente: “España tiene sed de elecciones”.

A mi juicio, creo que sí está suficientemente claro, que el que tiene “sed de elecciones” es él y su partido. Y me parece muy bien que quiera calmar esa sed cuanto antes. Todos sabemos que la sed es una necesidad muy fuerte y que produce un estado de ansiedad muy difícil de soportar. Pero, por favor, no me haga Vd. partícipe de ese estado de ansiedad que Vd. padece y me meta en el mismo cesto en que están Vd. y otros sedientos de su partido. Déjenos al resto de los ciudadanos que tengamos la clase de sed que nos incumba. Sr. Rajoy, España no es el P.P.. España y los ciudadanos españoles, somos algo mucho más amplio y variado.

Y ya que estamos con la sed a vueltas, yo quisiera trasladarle a Vd. y a todos sus colegas que viven de la política, sean del PP, del PSOE, de IU o de cualquier otro partido político y ejerzan sus tareas en el Parlamento español o en cualquiera de los 17 Parlamentos autonómicos o en el gobierno central o en los autonómicos o en los distintos ayuntamientos, que yo también tengo sed. Tengo “sed de ideas”.

 Tengo una sed tremenda de poder beber en esas secas fuentes que Vds. son incapaces de hacer manar y que tanto dinero nos cuesta mantener a los contribuyentes. Sus cerebros están secos de ideas para poder resolver los acuciantes problemas con que nos enfrentamos a diario los ciudadanos. De sus pobres y cortas mentes, solo brota una idea: “¿qué hay de lo mío?”. Y además, engañan permanentemente al resto de ciudadanos con una escenografía teatral, propia de un vodevil. Se abre una puerta y aparece un cantamañanas diciendo una parida. Se cierra ésta y aparece otro más tonto aún que el anterior diciendo otra. Y todo ello con una chabacana música de fondo en la que unos y otros cantamañanas desafinan permanentemente.

No sé cuántos ciudadanos más sufrirán la sed de ideas que a mí me abrasa actualmente. Pienso que seremos unos cuantos más. Les pido por favor a toda la clase política que hagan un esfuerzo sobrehumano, se compadezcan de mí y de otros cuantos, y nos envíen, aunque sea unas gotitas de ideas para mojarnos los labios.

lunes, 10 de enero de 2011

COMUNICANDO

Pues resulta que esta mañana a unos cobardes enmascarados, incapaces de dar la cara, se les ha ocurrido que hoy era un buen día para cachondearse, una vez más, de los ciudadanos que pretendemos vivir más o menos en paz. Unos fantoches que no se representan ni a sí mismos, ocultos como aparecen de forma sistemática, pretenden que nos creamos la última parida que se les ha ocurrido.
La comunicación funciona cuando un emisor lanza un mensaje y cuando un receptor capta ese mensaje. Hoy este receptor, este ciudadano, se encuentra comunicando. Cuando los mafiosos que se esconden tras unas capuchas y el resto de mafiosos que los apoyan, los aplauden, y que tienen como medio de vida el secuestro, el crimen y el atentado terrorista, y que tienen como principal fuente de financiación la extorsión, el chantaje y el tráfico de drogas y armas, dicen las mentiras que acostumbran, este ciudadano comunica. No logro sintonizar con su longitud de onda.

Dicho de otra manera, cuando alguien no da la cara para defender sus ideas, lo más probable es que no las tenga. Y a mí se me hace muy difícil, (quizás sea un poco “corto”) entender las propuestas que trata de trasladarme un grupo de mafiosos, del que solo conozco asesinatos, secuestros y extorsión. Todavía no he oído a estos fantasmas ninguna idea racional, sólidamente argumentada y no sostenida por la fuerza de las pistolas, la goma 2 y demás argumentos disuasorios.
Admito, aunque no comparta, los nacionalismos sean del signo y de la nacionalidad que sean. Admito, aunque no me guste o no me convenzan, las ideas y argumentaciones nacionalistas: son tan respetables como las mías. En una palabra, admito el diálogo, el debate y la discrepancia. Estoy convencido de que esa es la esencia de la convivencia y, en mi opinión, la convivencia es algo esencial en las relaciones de los ciudadanos.

Mientras estos fantasmas enmascarados no quieran ser ciudadanos y opten por imponer su modelo mafioso, enfrentado radicalmente al estatuto de ciudadanía que nos hemos dado los demás, este ciudadano estará comunicando. Y este ciudadano (y unos cuantos millones más), seguimos esperando y deseando que, de una puñetera vez, tengan, solamente un indicio mínimo de racionalidad y sean capaces de verdad, a cara descubierta, después de declarar unilateralmente el abandono definitivo de los argumentos disuasorios, de contarnos cuál es su idea de convivencia ciudadana. Nos gustará más o menos como cualquiera otra. Pero si los métodos argumentales empleados en la defensa de esa idea son los del razonamiento, el diálogo, la discrepancia y el debate político, sin ningún “catalizador” de plomo, de amonal, o de pentrita, podríamos constatar hasta dónde llega el alcance de sus tesis y el seguimiento social de las mismas. ¡Ojala llegue pronto ese día!. En ese momento este ciudadano dejará de comunicar. Oirá y escuchará sus argumentos con la misma libertad que escucha a los demás. Podré analizarlos, compartirlos o discrepar de ellos. Entretanto, los mensajes encapuchados me llegarán con tal distorsión, que mi aparato receptor será incapaz de captar. Comunicará.